viernes, 3 de abril de 2015

Mi vecina Marie

Seré breve porque los posteos largos no le gustan. Y a mí tampoco, hay que decirlo, por algo nuestros blogs son como son.

Allá por el 2010, Marie me hizo famoso. Salió en un programa que ya no existe con una conductora muy boluda (hablaríamos del tema años más tarde, café mediante, la única vez que nos vimos) y mencionó a El día de la tromba como el único blog que seguía a diario.

Hoy, la que es noticia por motivos menos alegres es ella. Entre una fecha y la otra nos seguimos en tuiter, ocurrió Breaking Bad, nos recomendamos películas y series, pasó por la radio, se sumó al VxD, corrió un par de maratones (hasta a mí me hizo correr con sus consejos runnerds) y fue mamá de Nippur.

Cuando nos encontramos con motivo de celebrar (?) el cierre del VxD yo le llevé una copia de un DVD chotísimo con Sangre de vírgenes y Extraña invasión y un billete con la cara de Minguito. Gasté las zapatillas pero de Sandro no había más. Ella, a modo de trueque me dio un libro de Vonnegut sellado con una de las pasiones que tenemos en común.


Desconozco si lo que está pasando es impepinable (esa palabra que aprendí por ella junto con "maridaje"). El cáncer es una enfermedad de mierda que se llevó a mi prima, a mi gata y ahora quiere llevarse a mi (nuestra) vecina Marie.

Me alegra saber que compartimos años de vida por esta y otras redes sociales, que mis contactos la conocieron y la leyeron y que algunos de los suyos también llegaron a mí. Y que si nos separaba su acérrimo amor por Riquelme, nos unían y nos unen Miyazaki, Sandro, Ricardo Bauleo y Takashi Miike, la sangre asiática de la buena y ese placer culpable que es el cine argentino berreta que pasan por Volver.

Esto no es un homenaje. Los homenajes son solemnes y tanto ella como yo nos pasamos la solemnidad bien por el culo. Lo escribo porque quiero y porque pase lo que pase, se vaya o se quede, sepan que a Marie la encuentran acá, en sus comentarios, sus recomendaciones, sus puteadas y sus risas. En fin, en sus palabras.

No sé si estaba en sus planes trascender, pero trascendió y ahora nos pertenece. Le guste o no, ocurrió. La vida es muy puta y no pide permiso.

Dejo acá porque la brevedad ante todo. Me voy a ver una de coreanos sanguinarios. Porque es de las que le gustan a ella.

Y a mí, desde que la conozco, también.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

La conocí por vos y le agradeci como a vos, la brevedad.
Una noticia de mierda, esperemos que le haga frente si es que se le puede hacer frente a tan chota enfermedad. Dialo

Leox dijo...

que mal para esto no hay palabras , solo silencio y buen recuerdo

Caro dijo...

También la conocí por vos. Gracias por este post. Había visto la nota en Clarín pero recién hoy encontré fuerzas para leer el texto de La Agenda. No escribo más porque solo tengo ganas de llorar y de putear. Abrazo fuerte.

Ana dijo...

Lo mío fue al revés, llegué a vos por ella. Tu minimalismo (frase y foto) le gustó y me gusta a mí también.
Beso!

mge dijo...

Gracias a todos por sus comentarios.

Marie falleció hace unos días pero antes de hacerlo nos leyó y la hicimos sonreír (y llorar un poco también). Así que no estén tristes.

Nos leemos :)